La clave del recibimiento al Señor es practicar de esta manera…

Hoy un hermano nos ha hecho una pregunta por Mensaje diciendo: "El Señor Jesús nos prometió que Él regresaría en los últimos días, también nos dijo las señales de Su regreso. Ahora, los desastres suceden continuamente en todas las partes, los terremoto, las hambrunas, las pestilencias y las guerras ocurren con frecuencia. A partir de estos signos, podemos confirmar que ahora es el día de que el Señor se aparece y obra. Pero ¿por qué todavía no lo hemos recibido?". Cómo podemos dar la bienvenida al regreso del Señor es una pregunta que debemos meditar. En primer lugar, debemos tener en cuenta de que cuando el Señor comenzó a hablar y llevar a cabo la obra en la Era de la Gracia, los discípulos que siguieron a Él, como Pedro, Juan y Natanael, etc., reconocieron que Él era el Mesías a través de Sus palabras y Su obra. Todas estas personas se pusieron a seguir al Señor Jesús al escuchar Sus palabras sintiendo que Sus palabras tenían autoridad y poder. Por ejemplo, vieron que el Señor calmó la tormenta y el mar por una frase, y resucitó al muerto con una sola frase... Como ellos habían presenciado personalmente las palabras del Señor Jesús, en las que como Él hablaba, así era, y como Él ordenaba, así ocurría. Por lo que reconocieron que Él era el Mesías, era la aparición de Dios mismo a través de Sus palabras y Su obra.

El Señor Jesús predijo: "Pero cuando El, el Espíritu de verdad, venga, os guiará a toda la verdad, [...]" (Juan 16:13). Esto demuestra que el Señor hablará y expresará más verdades y nos dirá verdades que no entendemos aún cuando Él regrese. El Señor también dijo: "Pero a medianoche se oyó un clamor: ¡Aquí está el novio! Salid a recibirlo" (Mateo 25:6). "He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo" (Apocalipsis 3:20). "El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias" (Apocalipsis 2:7). Estas profecías nos dicen que deberíamos aprender con vírgenes sabias para prestar atención a escuchar la voz de Dios, para que podamos ser arrebatados e ir al banquete con el Señor. Si sólo oramos y leemos la Biblia en la iglesia todos los días como los fariseos que aguardaban en el templo. Es decir, si no prestamos atención a la voz de Dios, ni buscamos en dónde se aparecerá y obrará Dios, es posible que seamos abandonados por el Señor. Si queremos recibir el regreso del Señor, debemos buscar las palabras y las declaraciones del Señor. Con que escuchemos la voz del Señor, podremos recibirlo.

Dios Todopoderoso dice: "Así, ya que estamos buscando las huellas de Dios, debemos buscar la voluntad de Dios, las palabras de Dios, las declaraciones de Dios, porque donde están las nuevas palabras de Dios, ahí está la voz de Dios, y donde están las huellas de Dios, ahí están los hechos de Dios. Donde está la expresión de Dios, ahí está la aparición de Dios, y donde está la aparición de Dios, ahí existe la verdad, el camino y la vida. Mientras buscabais las huellas de Dios, ignorasteis las palabras que dicen que 'Dios es la verdad, el camino y la vida'. Y es que, cuando muchas personas reciben la verdad, no creen que han encontrado las huellas de Dios y mucho menos reconocen la aparición de Dios. ¡Qué error tan grave es ese! La aparición de Dios no se puede reconciliar con las nociones del hombre; mucho menos puede Dios aparecer por órdenes del hombre. [...] Si queréis presenciar la aparición de Dios, si queréis seguir las huellas de Dios, entonces debéis primero trascender vuestras propias nociones. No debes demandar que Dios haga esto o aquello; mucho menos debes colocarlo dentro de tus propios confines y limitarlo a tus propias nociones. En cambio, debéis preguntar cómo debéis buscar las huellas de Dios, cómo debéis aceptar la aparición de Dios, y cómo os debéis someter a la nueva obra de Dios; eso es lo que el hombre debe hacer. Siendo que el hombre no es la verdad, y que no posee la verdad, el hombre debe buscar, aceptar y obedecer"("La Palabra manifestada en carne" ).

La profecía del regreso del Señor se ha cumplido. El Señor ha vuelto y está hablando a las iglesias. Esto cumple la profecía de la Biblia: "El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias" (Apocalipsis 2:7). Haga clic para contactarnos, vamos a escuchar juntos la voz de Dios para recibir al Señor.

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